Proverbios 16:3 nos anima con una promesa poderosa: “Pon en manos del Señor todas tus obras, y tus proyectos se cumplirán.” Este versículo nos recuerda que el verdadero éxito no proviene solo de nuestros esfuerzos o planes, sino de una vida entregada a la voluntad de Dios.
Entregar significa dedicar algo completamente a Dios, reconociendo que Él es el Señor de todas las áreas de nuestra vida. Cuando colocamos nuestros sueños, proyectos y preocupaciones en Sus manos, demostramos confianza en Su sabiduría y soberanía.
Esto no significa que no enfrentaremos desafíos o cambios en nuestros planes. Al contrario, entregar todo al Señor nos da paz, sabiendo que, incluso en las dificultades, Él está obrando para nuestro bien. Su visión es más grande, y Su propósito es perfecto.
Hoy, reflexiona sobre lo que aún no has entregado al Señor. Puede ser un proyecto, una decisión difícil o incluso preocupaciones cotidianas. Entrégaselo todo en oración, confiando en que, al alinear tus pasos con Su voluntad, Él abrirá el camino y te llevará al éxito que realmente importa.
Oración: Señor, te entrego todo lo que soy y todo lo que hago. Guíame según Tu voluntad. Amén.